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Cuna de emprendimiento / El germen de la Ciudad de la Salud
La incubadora de la innovación en Cáceres
Lola Luceño Barrantes
El Centro de Cirugía acoge e impulsa a una decena de empresas y fundaciones volcadas en la investigación. Hay firmas con aplicaciones únicas, soluciones médicas avanzadas y otros proyectos de alta tecnología y salud.2015
El Centro de Cirugía de Mínima Invasión Jesús Usón (CCMIJU) es un espacio de referencia internacional, único en el mundo por sus características, al que cada año llegan cientos de investigadores y facultativos para formarse, realizar ensayos clínicos y aprovechar sus instalaciones innovadoras. Decir vanguardia es quedarse corto. Tiene colaboradores científicos en todo el planeta y recibe a empresas de diversos países que acuden a este complejo, junto al campus, para probar sus avances y dispositivos médicos. Puesto que el conocimiento genera más conocimiento, el centro ha optado por no desaprovechar ni un ápice de su dinamismo y ha incubado nuevas empresas en su interior, facilitándoles su apoyo y sus instalaciones
Hoy ya existen una decena de iniciativas que ocupan todos los espacios disponibles, todas ellas con un alto grado de innovación. Siete están dedicadas a la investigación: Mobbeel, capaz de sustituir los pins y contraseñas de determinadas aplicaciones por datos biométricos (una foto del iris, una muestra de la voz…); el Centro para la Imagen Biomédica de Extremadura (CIBEX); Bioimag y sus soluciones médicas; la Fundación para la Investigación y Formación en Reproducción Asistida (FIFRA); el programa Agrotech con ocho nuevas empresas del sector de la salud; la fundación COMPUTAEX CENITS, que gestiona el Supercomputador Lusitania; y la Fundación Doctor Pascual, dedicada a investigación.
Pero además, el CCMIJU alberga las sedes de la Sociedad Gestora de la Ciudad de la Salud y la Innovación, del Clúster de la Salud y de la Asociación de Amigos del Centro de Cirugía (ASCEMI).
Por tanto, el complejo se ha convertido por méritos propios en el germen de la futura Ciudad de la Salud, una y otra vez proyectada para Cáceres. En su interior ya existe esta estructura. Resulta curioso caminar por sus pasillos y comprobar la existencia de distintas empresas relacionadas con la innovación, ese modelo anglosajón que tantos éxitos ha deparado y que ahora muestra sus bondades en Cáceres. El CCMIJU ayuda a la creación y consolidación de estos emprendedores y fundaciones porque ellos a su vez aportan conocimientos al centro. Todos, o casi, desarrollan investigaciones relacionadas con la salud y la innovación que suelen derivar en proyectos de I+D conjunto con el propio CCMIJU.
«La incubación de empresas es uno de los principales objetivos de nuestro último plan estratégico», explica José Luis Añover, asesor jurídico del centro. De hecho, en el edificio ya se previó este espacio cuando fue construido e inaugurado en 2007. Los emprendedores reciben asesoramiento en la creación de sus negocios (trámites, proyectos, financiación…), pero además se les asigna un espacio y pueden utilizar las infraestructuras del centro, sin igual en el país: laboratorios, conexiones, servicios de seguridad…
«Este es un núcleo de conocimientos y relaciones, con muchas actividades de formación e investigación, con socios de todo el mundo, con empresas de varios países que vienen a desarrollar sus productos, por ello decidimos trasladar todo ese movimiento al mundo empresarial, favoreciendo el emprendimiento», subraya Francisco Sánchez Margallo, director científico.
SIGUEN CRECIENDO Las empresas incubadas ya ocupan las 18 dependencias destinadas a este fin, pero siguen creciendo. En un mes se incorporará Inexcor, firma de I+D dedicada a la investigación cardiovascular, de la que forman parte diversos especialistas, entre ellos el jefe de Cardiología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid. Otras firmas incubadas como Bioimag o CIBEX, con proyectos próximos a grandes núcleos de innovación, también prefieren buscar su hueco en el CCMIJU por sus instalaciones, generando un beneficio mutuo: el centro les aporta sus recursos y ellas sus avances.
«Nosotros conocemos nuestro trabajo, pero no la experiencia del mundo de las empresas, por eso consideramos muy positivo trabajar juntos y que ellas también nos marquen las líneas por las que dirigirnos», señala el director científico. Además, existe otra consecuencia muy beneficiosa para todos: las propias empresas intercambian conocimientos y experiencias, dando lugar a nuevos proyectos.
«Estamos muy satisfecho de la evolución de la incubadora, porque además se han creado nuevos empleos», indica Sánchez Margallo. Al centro también le complace contribuir a un nuevo modelo económico en Extremadura. «Al igual que el nuestro, estas empresas pertenecen a un mundo que se mueve muy rápido. Las tecnologías que sirven para un día ya no sirven para el siguiente, y hay que actualizarse continuamente», reflexiona.
De hecho, muy cerca del CCMIJU está prevista la construcción de la Bioincubadora de Cáceres, que acogerá a empresas y grupos de investigación basados en la ciencia y la tecnología (Biomedicina, Biotecnología, Bioingeniería…). Conformará, junto al CCMIJU y al nuevo hospital, la futura Ciudad de Salud y la Innovación, con espacios para laboratorios, talleres y otras zonas comunes al servicio de los investigadores. El diseño del proyecto fue adjudicado a final de 2014 con un plazo de 15 meses.
Esta noticia pertenece a la edición en papel de El Periódico Extremadura. (5/10/2015)
